Las asanas no son un mero ejercicio físico, pues afectan a procesos psicológicos y fisiológicos que están relacionadas con todos los demás aspectos del Yoga, y tienen su raíz en la ética y su fin último en la espiritualidad.
El Yoga utiliza el cuerpo para ejercitar y controlar la mente, de forma que en un estadío posterior, el cuerpo y la mente puedan, en conjunción, armonizar con el alma.
Hoy te queremos hablar de las POSTURAS SENTADAS:
Las posturas sentadas son relajantes. Eliminan la fatiga, despejan el cerebro y calman los nervios. Regularizan la presión sanguínea y ayudan a recuperarnos de las enfermedades. Contribuyen a que podamos gozar de un sueño reparador.
De entre todos los tipos de posturas las sentadas son probablemente las que menos esfuerzo exigen a los practicantes. Las asanas sentadas, además, favorecen la práctica de la meditación y de pranayama o de ejercicios respiratorios.
Cuál es tu postura sentada preferida? Contanos!