La luna llena en Leo nos invita a enfocarnos en nuestro sentido de identidad.
La energía leonina impregna la instancia en la que nos volvemos autoconscientes.
El disfrute de la sensación plena de ser, de existir, de estar aquí y ahora, alimenta el anhelo de irradiar esto que somos.
Aparece la necesidad de ser reconocid@s junto con el deseo de celebrar la vida a través de lo lúdico, a través de la danza creativa, entendiendo la vida como un maravilloso y deslumbrante juego.
La pregunta por nuestra identidad es central! Y acaso la vamos respondiendo en el devenir de nuestras propias vidas.
¿Quién soy?
Una de las preguntas más conmovedoras que podemos hacernos y que nunca encuentra respuesta definitiva.
La respuesta acerca de la identidad no es otra cosa que una construcción
permanente.
Podemos ver nuestra vida como un derrotero que intenta responder ese
interrogante básico.
Se dice que dentro del vientre materno, el ser que se está gestando canta una canción que dice “No me voy a olvidar”. Pero cuando nace, la canción dice “Ya me olvidé”
Somos un florecimiento de la vida y en nuestra singularidad radica nuestra belleza.
Animémonos a expresar nuestra esencia al mundo, a compartirla con alegría y generosidad.
Cada un@ de nosotr@s es una forma única con la que la Vida canta su canción y despliega su danza.
Sat Nam!